La multinacional española trabaja en el túnel más largo del sudeste asiático y con este proyecto refuerza su posición en el mercado de India
El túnel de Chenani (India), que con sus 9,2 kilómetros es el más largo del sudeste asiático, cuenta para su correcto funcionamiento con la tecnología de Indra. La compañía española ha sido responsable del diseño, desarrollo, implantación y puesta en marcha del sistema de gestión del túnel.
El proyecto, de 6,5 millones de euros, está basado en la solución Horus, que facilita la máxima operatividad y eficacia en la gestión de este tipo de infraestructuras. La tecnología de Indra contribuye a garantizar la circulación ininterrumpida y segura dentro del túnel, situado a 1.200 metros de altura, en una zona en la que son frecuentes las condiciones meteorológicas adversas, las avalanchas de tierra y nieve y las averías de vehículos.
Entre los sistemas instalados por Indra en el túnel de Chennai se encuentran la detección automática de incidentes y videovigilancia, control de tráfico, señalización, detección de incendios, control de accesos y llamadas de emergencia, así como otros subsistemas como iluminación, ventilación, comunicación o energía.
Este proyecto refuerza la posición de Indra en el país asiático y proporciona una referencia única en Asia. En el país, Indra es líder tecnológico en gestión de tráfico aéreo y ha dotado con sus soluciones los metros de Kolkata y Delhi, varias autopistas y el metro y monorraíl de Bombay.